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Ruta por Formentera en un día
Este es el resumen del itinerario de un día por Formentera que te proponemos:
- La Savina.
- Playa de Ses Illetes.
- Es Pujols
- Es Caló de Sant Agustí.
- El Pilar de la Mola.
- Faro de la Mola.
- Playa de Es Arenals.
- Faro de Cap de Barbaria.
🛏️ Si también decides hacer noche en Formentera, te recomiendo nuestro alojamiento en La Savina. Nos quedamos en esta preciosa casita, junto al Parque Natural de Ses Salines. La decoración y el entorno son una preciosidad. Si quieres ver más opciones, te animo a consultar nuestra guía sobre dónde dormir en Formentera.
Desayuno en La Savina
El mejor lugar para empezar una ruta por Formentera en un día es La Savina. Aquí llegan los ferrys desde Ibiza, así que es el punto más estratégico para cualquier comienzo.
Y qué mejor que arrancar con un rico desayuno. Junto al puerto está Salines Café, un sitio que me encantó. Decoración blanca con detalles de madera, mesas amplias y luz por todas partes. Es el lugar perfecto para arrancar el día sin prisa, con un desayuno o brunch saludable, buen café y mejores zumos.
La Savina es mucho más que el puerto de llegada. Aunque es la puerta de entrada a la isla, merece la pena dedicarle un rato. Desde aquí puedes dar un paseo tranquilo por el muelle, ver las barcas de pescadores o acercarte a las salinas que se extienden muy cerca y que, según la hora del día, se tiñen de tonos rosados o dorados.
Como te decía, nosotros nos alojamos aquí, justo en las salinas, y salir a pasear por ellas al amanecer, en silencio, es realmente maravilloso.
También es el mejor lugar para alquilar una moto o un coche si vas a recorrer Formentera por tu cuenta. Hay muchas agencias junto al puerto y todo está pensado para que en menos de 15 minutos estés en marcha.
⛵ Un plan muy guay en la isla de Formentera es hacer este paseo en barco por sus calas. La excursión tiene una duración de 4 horas y sale de La Savina. Incluye la comida y material para practicar snorkel. Se visitan lugares como Cala Saona o Ses Illetes. Desde luego, es otra forma de conocer Formentera en un día que también merece la pena considerar.
Playa de Ses Illetes
Un lugar que no puede faltar si tienes que ver Formentera en un día es la Playa de Ses Illetes, probablemente el lugar más icónico de esta isla balear.
Esta lengüeta de arena blanca con aguas de un turquesa cristalino que atraviesa la pupila es una locura y seguro que no quieres perdértela. Se encuentra en la península Es Trucadors, en el norte de la isla. Ya sea para darte un baño o para ver este lugar con tus propios ojos, Ses Illetes no puede faltar en la ruta.
Es Pujols
Es Pujols es la zona más turística de la isla, pero no por eso hay que evitarla. De hecho, el paseo junto al mar tiene su encanto. Tanto nos gustó que, como pasamos varios días en la isla, volvimos varias veces a tomar algo en la playa.
En Es Pujols encontrarás heladerías, tiendas de ropa boho, puestos de artesanía… El ambiente es animado pero sin agobios, sobre todo si visitas la isla fuera de temporada alta. Es un buen lugar para pasear, hacer alguna compra o simplemente observar cómo se va transformando la luz del día sobre el agua.
Aquí puedes parar en varios sitios que nos encantaron. Uno es Espardell, una cafetería muy bien cuidada con café de especialidad, tartas caseras y opciones sanas. Tiene una terracita agradable. El otro es Juice To Flow, perfecto si te apetece algo más fresco. Tienen smoothies naturales, zumos prensados en frío y bowls de fruta.
Los dos lugares están cerca, así que puedes elegir según lo que te pida el cuerpo. Además, hay heladerías muy bonitas y locales de todo tipo junto al mar.
Y si te pilla aquí la hora de comer o cenar, una opción muy recomendada por los locales es el Restaurante Capri. Está justo en esta zona, tiene una carta variada de cocina mediterránea y un ambiente tranquilo, sin pretensiones. El pescado es delicioso, doy fe de ello. Buena relación calidad-precio, platos bien elaborados y servicio amable.
Comida en Es Caló de Sant Agustí
Es Caló de Sant Agustí es un antiguo pequeño pueblo costero que todavía conserva su estructura tradicional: barquitas varadas sobre rampas de madera, casas bajas encaladas y una calma que lo envuelve todo. No hay multitudes ni ruidos, solo el sonido del agua y el ir y venir suave del viento.
El mar aquí es como piscina natural: aguas cristalinas, poco profundas y llenas de vida. Es el lugar ideal para detenerse un rato, bañarse si el tiempo acompaña o simplemente caminar por su entorno.
Hay varios restaurantes frente al mar. Te recomiendo Can Pasqual Restaurant. Aunque el precio es algo más elevado, la calidad y el entorno lo compensan con creces. El arroz caldoso con pescado del día es una de sus especialidades más recomendadas y yo aún lo tengo en mi memoria, ¡delicioso!
El Pilar de la Mola
Continuando hacia el este, el siguiente destino que merece una parada es El Pilar de la Mola, la zona más elevada y rural de Formentera.
Aunque el pueblo es pequeño, es guay detenerse a pasear por sus calles tranquilas y ver cómo se entremezclan la vida local, el campo y el encanto isleño. Es menos turístico por lo que así tendrás otra percepción del lugar. Además, si tu visita coincide con miércoles o domingo, encontrarás su mercado artesanal con puestos de artistas y creadores locales.
Faro de la Mola
Continuamos con otro de los lugares más bonitos que ver en Formentera, el Faro de la Mola. La carretera que sube hasta esta zona serpentea entre campos, muros de piedra seca y casitas dispersas, y ya anticipa que estás entrando en otra Formentera, menos explorada y con una energía muy distinta.
Al llegar, lo que más impacta no es tanto el faro en sí, sino lo despejado que está todo: sin edificios alrededor, con el horizonte bien abierto y la sensación de que el cielo está más cerca. El faro está justo al final del camino, blanco, sencillo y con vistas al mar en la distancia.
Muy cerca hay un mirador desde donde puedes ver casi toda la isla alargada, con el mar a ambos lados. También hay una cafetería con una terraza muy agradable donde parar a tomar algo. Es tranquila, con mesas de madera y buena sombra. A mí me encantó sentarme allí. Me pedí un café y me quedé un buen rato dibujando el faro.
Playa de Es Arenals
Otra buena playa de Formentera para relajarse un rato es la Playa de Es Arenals. Se trata de una de las más largas y cómodas de la isla, con arena clara, mar tranquilo y espacio de sobra.
Tiene zonas con servicios (duchas, alquiler de hamacas, etc.) y otras más libres, así que puedes elegir según lo que te apetezca. El agua es una pasada, ya que es cristalina y poco profunda, perfecta para refrescarse.
Aquí está el chiringuito Gitana, uno de esos sitios que te invitan a parar sin mirar el reloj. Tiene buen ambiente, con vistas al mar y una carta sencilla pero cuidada. Puedes tomar un limonada natural, una cerveza fría o incluso picar algo si te entra hambre.
Nosotros nos sentamos en la terraza con los pies llenos de arena y nos quedamos mirando el mar sin hacer nada más. Esa sensación de calma absoluta es parte de lo que hace tan especial a Formentera.
Atardecer en el Faro de Cap de Barbaria
Para terminar el día, dirígete al suroeste de la isla, hasta el Faro de Cap de Barbaria. Es uno de los lugares más emblemáticos y fotogénicos de la isla, y no solo por el faro en sí, sino por todo el recorrido que lleva hasta él.
En temporada alta, el acceso en coche está restringido, así que se debe dejar el vehículo en un aparcamiento habilitado y continuar a pie el último tramo. Esa caminata de unos 10-15 minutos es una experiencia en sí misma, ya que el camino es precioso.
Al llegar al final, el faro se alza sobre un acantilado impresionante y cae en vertical hacia el Mediterráneo. La vista es abierta, potente y transmite una sensación de estar en el fin del mundo.
Muy cerca, bajando con cuidado, se puede acceder a la pequeña cueva conocida como la Cova Foradada, desde donde se obtiene una vista única del mar enmarcada por la roca. Yo me senté allí un rato para respirar hondo y pintar el faro.
Mapa de qué ver Formentera en un día
En el siguiente mapa verás los lugares imprescindibles de Formentera marcados en él. Así te será más fácil organizar tu ruta.
Hasta aquí nuestro post sobre qué ver en Formentera en un día. Es una isla pequeña, sí, pero llena de rincones que se quedarán contigo para siempre. Si solo tienes un día, esta ruta te permite ver lo esencial, disfrutar de sus playas, sus faros, su comida y esa calma que la hace tan especial.
Lo importante no es correr, sino elegir bien y dejarte llevar por el ritmo pausado que aquí se respira desde que pones un pie en la isla.
Espero que esta ruta de Formentera te sirva para saborearla sin prisa, aunque sea en pocas horas. Y si puedes, quédate más tiempo. Porque Formentera no es solo lo que se ve: es lo que se siente. Y eso… merece al menos un día pero si es más, mejor.
